La treta del PP que amenaza los escaños de los partidos independentistas en la Eurocámara

BruselasLa ofensiva del PP contra el gobierno de Pedro Sánchez y los partidos independentistas no se detiene, tampoco desde el flanco de las instituciones europeas. El último ataque lo ha impulsado el eurodiputado popular y último jefe de la delegación de Ciudadanos en el Parlamento Europeo, Adrián Vázquez. Lleva meses trabajando para conseguir la visita de una misión de eurodiputados a Madrid, que finalmente se ha desplazado esta semana, para presionar para que se aplique la reforma electoral de los comicios en la Eurocámara en España, una directiva que el Estado no ha transpuesto de los partidos el PNV, EH Bildu y el BNG porque exige que, para obtener sólo un escaño, hay que alcanzar al menos entre el 2% y 5% del porcentaje de voto. Ahora no hay un umbral mínimo y, en cada elección, depende de la participación y la ley de Hondt. por tanto, la aplicación de un umbral dificultaría a partidos que sólo se presentan en algunas partes del Estado entrar en la Eurocámara. en las últimas elecciones, la coalición del PNV y Coalición Canaria se habría quedado fuera, ya que sólo obtuvieron un 1,63%. Ahora bien, si el mínimo de representación se pusiera al máximo que permitiera la ley europea, el 5%, tampoco tendrían ningún escaño la coalición de Ara Repúbliques (ERC, EH Bildu, BNG y Ara Més), que logró un 4,91%, ni Junts, que se quedó en un 2,52%. Tampoco entrarían Sumar, Se Acabó la Fiesta ni Podemos; y, por tanto, sólo tendrían eurodiputados el PP, el PSOE y Vox.

El PP de momento no aboga por ningún umbral concreto entre el 2% y el 5% que marca la normativa europea, y asegura que esto debería negociarse. Sin embargo, si se aplicara el 2%, o un porcentaje ligeramente superior, la representación de los partidos que sólo se presentan en Cataluña, Galicia o País Vasco correría peligro. Pero al PP parece que no le importe mucho, más bien al contrario. De hecho, Vázquez pide, en declaraciones al ARA, que "se dejen de dar privilegios a los partidos nacionalistas" y que se aplique ese umbral, que "solo quiere evitar la fragmentación política". Y, en caso de que no lleguen a ese mínimo de porcentaje de voto en todo el Estado, el exdirigente de Cs les invita a hacer "más coaliciones" entre ellos para superar el mínimo. Sin embargo, Vázquez no tiene muchas esperanzas de que el gobierno español acabe cediendo a aplicar la reforma. "El problema es que Sánchez es un rehén de los nacionalistas", afirma.

En cambio, el eurodiputado socialista Juan Fernando López Aguilar, que también formó parte de la misión que viajó hasta Madrid esta semana, pone el grito en el cielo con las intenciones de los populares. "Eso supondría acabar con la pluralidad democrática de España", dice el ex ministro de Justicia en una conversación con este diario. En este sentido, recuerda que habría que reformar la Loreg (la ley orgánica del régimen electoral general) y, por tanto, pide la implicación del PP; pero lamenta que a la derecha "sólo le interese cargar contra Sánchez" y critica que los populares pretendan modificarla "de espaldas a los partidos nacionalistas". "Eso nunca lo hemos hecho, porque restaría legitimidad a las elecciones y dejaría a muchos ciudadanos sin representación", añade el también catedrático de derecho constitucional.

En la misma línea, la eurodiputada Diana Riba (ERC) acusa al PP de "buscar problemas políticos donde no los hay" y asegura que en la UE "no hay esa urgencia". Además, la única representante republicana de la Eurocámara apunta a que podría aplicarse la reforma electoral europea y modificar que España sea una circunscripción única, y pone sobre la mesa que, por ejemplo, haya muchas más circunscripciones, como en las elecciones al Congreso, que va por provincias. De hecho, España es el único gran estado miembro de la UE junto a Alemania que en los comicios europeos sólo tiene una circunscripción.

En cuanto a Junts, que es uno de los partidos catalanes afectados, ha declinado hacer ningún comentario al respecto en este diario; tampoco sobre si estudiarían concurrir conjuntamente con otras formaciones. Cabe recordar que Convergència i Unió (CiU) se había presentado anteriormente a las elecciones europeas en coalición con el PNV y el BNG.