Minsait Cyber: soluciones para afrontar las amenazas presentes y futuras en ciberseguridad

La industria de la ciberseguridad juega un rol estratégico y crucial en la protección de un país. Especialmente, en el presente contexto geoestratégico que es "tan volátil" y que "está marcado por tensiones entre potencias, ciberataques patrocinados por estados, guerras híbridas y una creciente dependencia digital a todos los niveles", subraya Minsait Cyber ​​–hasta ahora SIA–, la compañía del Grupo Indra especializada en ciberseguridad.

Según The Global Risks Report de 2024, una encuesta del Foro Económico Mundial en la que toman parte 1.500 expertos, los ciberataques representan ya el quinto principal riesgo global. Son tendencia los ciberataques potenciados con inteligencia artificial (IA) generativa y computación cuántica, el aumento de los Deep Fakes, el incremento de incidentes y brechas en entornos cloud, sistemas de control industrial, dispositivos IoT y redes 5G, el auge de la desinformación con motivación política o social, los ataques a la cadena de suministro o el ransomware (Raas).

La ciberseguridad y la soberanía digital se han convertido en pilares estratégicos para la protección, autonomía y resiliencia de un país. "Contar con capacidades propias asegura decisiones independientes, salvaguarda intereses estratégicos y refuerza el control sobre sectores clave", asevera Minsait Cyber, y reivindica que la industria de la ciberseguridad "no es sólo un proveedor de servicios; es un pilar estratégico para la seguridad nacional en el siglo XXI".

Afrontar los nuevos riesgos

Precisamente cómo conseguir más soberanía digital y cómo reducir la dependencia de tecnología de otros países ha sido uno de los temas centrales que Minsait Cyber ​​ha abordado recientemente en un encuentro sobre ciberseguridad en Barcelona. Con el título Ciberseguridad más allá de la protección: una ventaja competitiva para el crecimiento de las organizaciones y con ponentes de primera magnitud, el evento ha tratado además el papel de la IA y los riesgos asociados, y la protección de los entornos operacionales e infraestructuras críticas.

En el encuentro se ha recordado que es vital garantizar que los sistemas de IA sean robustos, confiables y éticos, porque los ciberdelincuentes a veces incluso van por delante de los avances, por lo que es esencial desarrollar modelos de IA resistentes a los ataques. Entre los más comunes, figuran la manipulación de datos de entrada para engañar al sistema de IA, la introducción de sesgos maliciosos o el sabotaje en el comportamiento de los modelos de IA.

Además, ahora que los entornos industriales y operacionales (OT) están conectando sus activos con las tecnologías de la información y la comunicación (IT), internet o la nube, están aflorando numerosas vulnerabilidades y se han incrementado los riesgos de forma alarmante. Según el Barómetro de Minsait Cyber ​​2023 de Ciberseguridad OT, sólo un cuarto de estas compañías aplica las buenas prácticas de ciberseguridad definidas por una normativa reconocida internacional y específicamente del sector, y el 93% no cumple con el análisis de riesgos específicos del ecosistema OT.

Reforzar la ciberseguridad como ventaja competitiva

La apertura del encuentro corrió a cargo de Salvador García, director de Indra Group en Cataluña, y de Roberto Espina, CEO de Minsait Cyber. Durante su discurso, Espina subrayó que "proteger adecuadamente los datos, los sistemas y la confianza de los clientes se traduce en una ventaja competitiva clara; las organizaciones que invierten en ciberseguridad no sólo reducen su exposición al riesgo sino que también ganan en reputación, fiabilidad y resiliencia frente a la competencia". Al finalizar el encuentro quedó claro que la ciberseguridad es clave para fortalecer la competitividad y abrir nuevas oportunidades de negocio en un mundo en el que la confianza digital es esencial. Análisis sobre inversión tecnológica en 2024 han apuntado que la ciberseguridad sigue destacando como una prioridad clave tanto en lo que se refiere al negocio como a la TI. Este año se prevé que la ciberseguridad ocupe la segunda posición entre los objetivos estratégicos de las organizaciones.