Muere Michael Madsen, uno de los protagonistas de 'Reservoir Dogs' y 'Kill Bill'

BarcelonaEl actor Michael Madsen, el icónico Mr. Blonde de Reservoir Dogs, ha muerto inesperadamente este jueves a los 67 años en su casa de Malibú, donde las autoridades han encontrado su cuerpo inerte a consecuencia de un paro cardíaco, según informa el representante del actor. La carrera de Madsen está intrínsecamente ligada al cine de Quentin Tarantino, que le convirtió en uno de los protagonistas de su debut como director, Reservoir Dogs, y también le regaló papeles importantes al díptico Kill Bill y en Los odiosos ocho.

Madsen debutó como actor en 1984 con un pequeño papel en Juegos de guerra, y fue saltando de papel secundario en papel secundario durante los primeros años de su carrera, algunos en películas lo suficientemente conocidas como Thelma y Louise (1991), donde estaba el músico tranquilo con el que sale Susan Sarandon. En Reservoir Dogs (1991) se interesó por el papel de Mr. Pink, que acabaría interpretando a Steve Buscemi, pero Tarantino le reservó el rol de Mr. Blonde, el criminal sin escrúpulos que pone de fondo Stuck in the middle with you para torturar a un policía y cortarle una oreja. Madsen aportaba al personaje carisma, elegancia y magnetismo, pero también una sensación de peligro inminente, de violencia a punto de estallar. Pulp fiction, pero el papel de Vincent Vega acabó siendo para John Travolta. Vincent Vega era, supuestamente, el hermano del personaje interpretado por Madsen en Reservoir Dogs (de nombre real, Vic Vega), y durante años Tarantino especuló con la posibilidad de reunir a los dos actores en una película, pero el proyecto nunca se concretó. Mientras, Madsen capitalizó el éxito de Reservoir Dogs en papeles secundarios en filmes como el thriller La fuga (1994), el western Wyatt Earp (1994), el filme de ciencia ficción Species (1995), los dramas criminales Donnie Brasco (1997) y Mulholland Falls (1996) o las dos primeras entregas de la franquicia familiar Libere Willy. Durante estos años también hubo muchos papeles en producciones menores e incluso telefilmes: con seis hijos de tres mujeres distintas, Madsen tenía muchas facturas por pagar.

Más o menos encasillado en el personaje de tipo duro con carácter rocoso que potenciaba su físico contundente, Tarantino le volvió a reclutar en Kill Bill 1 (2003) y Kill Bill 2 (2004), donde Madsen es el hermano de Bill y uno de sus letales sicarios. Pero la película juega con el arquetipo habitual del actor y lo presenta viviendo en un tráiler de mala muerte y ganándose la vida limpiando lavabos, una imagen desidealizada del asesino cool de Reservoir Dogs. Los caminos de Madsen y Tarantino volverían a cruzarse en el 2015 en el western Los odiosos ocho, donde el actor interpreta un cowboy que se aloja en la puesta donde transcurre buena parte de la acción del filme, y Madsen también haría un pequeño cameo en Érase una vez en Hollywood (2019).

Madsen nunca ha sido un actor quisquilloso con sus papeles. En 2009 trabajó en una quincena de películas, y la mayoría de años no descendía de los seis o siete títulos, la mayoría de ambiciones comerciales moderadas y directores poco conocidos. También sacó partido de su voz haciendo de narrador en videojuegos como Grand Theft Auto 3. En los últimos años su productividad no había mermado –tiene pendiente de estreno Resurrection road, Concesiones y Cookbook for southern housewives–, pero a menudo se veía implicado en problemas con la ley: en el 2022 le detuvieron por entrar en una propiedad privada y en el 2024 por agredir a su exmujer. Poco antes de su primer arresto, su hijo de 26 años, Hudson, se había suicidado disparándose un disparo en la cabeza.