Acuerdo de Gobierno y Comunes para aplazar la nueva tasa turística a cambio de otros 60 millones para vivienda
También pactan más inspecciones en los pisos turísticos por la tasa y acelerar el registro de grandes tenedores


BarcelonaAcuerdo entre Comuns y el Govern para aplazar la nueva tasa turística tras el lío que se vivió en el Parlament la semana pasada, cuando la cámara tumbó el retraso de los nuevos incrementos en este impuesto. La consellera de Economía, Alícia Romero, y la líder de Comunes en el Parlament, Jéssica Albiach, han anunciado el pacto por el que el grupo lila cambiará su voto y avalará el aplazamiento a cambio de que el Govern destine otros 60 millones adicionales a políticas de vivienda. Estos recursos se suman a la inversión total de 850 millones de euros en esta carpeta que Gobierno y Comunes habían pactado en la negociación de los suplementos de crédito. Con los votos de Comuns, el Govern se asegura una mayoría para retrasar hasta octubre la entrada en vigor de las nuevas tarifas, que ahora se están discutiendo en el Parlament. Según ha dicho Romero, ERC votará a favor. Los republicanos habían pactado con el ejecutivo ese aplazamiento a cambio de introducir cambios en el diseño de la tasa.
Comunes da ahora luz verde al aplazamiento después de votar en contra para defender lo que en un primer momento habían pactado con la conselleria de Economía: que la tasa turística se duplicara en toda Cataluña y que todos los ayuntamientos (no sólo Barcelona) pudieran establecer un recargo de hasta cuatro euros. Esquerra se desmarcó de este acuerdo y el Consejo de Garantías Estatutarias alertó que, al hacerlo por la vía del decreto, el ejecutivo estaba invadiendo las competencias del Parlamento. Entonces, el Govern decidió aplazarlo, pero se topó con la oposición de Comuns: cuando el decreto de aplazamiento llegó a la cámara catalana, votaron en contra y lo tumbaron. También lo hicieron Junts, PP, Vox y Aliança Catalana, lo que obligó al Govern a aprobar de urgencia este martes un nuevo decreto de aplazamiento. En rueda de prensa con Albiach, Romero ha vuelto a reprochar a Junts su voto: "Los que dicen que defienden tanto al sector votaron en contra de las peticiones del sector", ha dicho.
Con este acuerdo, los comunes ceden en el primer pulso con ERC en una negociación que el Govern tiene abierta a dos bandas. Pero lo hacen a cambio de otros tres compromisos, más allá de los 60 nuevos millones por vivienda –30 serán para comprar por tanteo y retracto y otros 30 irán al fondo de cooperación local–. "Hemos decidido dar un paso adelante para negociar", ha explicado Albiach. Así, Comuns y Govern han pactado incrementar las inspecciones en los pisos turísticos por el pago de la tasa con una campaña que permitirá, también, actualizar el censo de estos establecimientos para verificar cuántos están activos respecto al total de licencias. La Asociación de Apartamentos Turísticos de Barcelona (Apartur) ha aplaudido esta última medida, reivindicada por el sector, pero ha lamentado que sólo se incremente la fiscalización en estos negocios y no en el resto de la hostelería.
Fruto del acuerdo anunciado este viernes, también se acelerará la aprobación del registro de grandes tenedores, que deberá producirse en un máximo de un mes para que ya funcione en octubre. Esto debería facilitar que estos propietarios paguen debidamente las tarifas incrementadas del impuesto de transmisiones patrimoniales, pactadas también entre Comunes y el Gobierno. Por otro lado, Comuns y Economia también han acordado abrir entre junio y julio una primera convocatoria del Pla de Barris para que llegue, al menos, a 20 municipios.
Próxima parada: el Parlament
Los 60 millones de euros anunciados hoy correrán a cargo del tercer suplemento de crédito que prepara el Gobierno, de 469 millones. Esta cifra responde a los recursos que la Generalitat dejará de ingresar entre mayo y octubre a causa del aplazamiento. Romero quiso agradecer a Albiach su "receptividad" a negociar un pacto que mantiene la alianza entre los socios de investidura, que son, de momento, los que aprobaron casi la totalidad de decretos que el Gobierno ha llevado al Parlament. La consellera también recordó que los recursos provenientes de la tasa turística sirven para que los ayuntamientos puedan invertir en limpieza y seguridad para compensar las "incomodidades" que el turismo genera en los municipios. Ahora bien, también subrayó el peso "importante" que tiene en el PIB catalán y recordó al sector que desde que la tasa empezó a aplicarse en Catalunya, en 2013, el turismo se ha incrementado en 5 millones de visitantes, hasta los 20 millones.
Ahora el PSC, Comuns y Esquerra tendrán que explorar un entendimiento en la comisión parlamentaria que trabaja en la reforma de la tasa turística. Tras desmarcarse del primer pacto entre Comuns y el Govern, los republicanos registraron una propuesta alternativa que plantea cobrar diferente en temporada alta que en baja, y que en algunos territorios supondría una rebaja de lo que ya se paga actualmente. Albiach ha dicho que confía en que los tres grupos puedan encontrar un entendimiento en los próximos meses en el Parlamento tras una situación que ha tildado "de absurda" a raíz de la división de los socios de investidura en las votaciones de la tasa la semana pasada.