BarcelonaLa opa del BBVA en el Sabadell empieza a parecerse a la que la antigua Gas Natural (hoy Naturgy) lanzó en el 2005 en Endesa. peligro de catalanizar a una Endesa que al final acabó en manos italianas (Enel).
Hoy, después de digerir las limitaciones impuestas por el gobierno español, como la imposibilidad de una fusión durante tres años, el BBVA anuncia que mantiene un proyecto contra el que están desde los gobiernos español y catalán hasta el mundo empresarial y económico del Principado. Uno, por la pérdida del único gran banco con sede en Catalunya –la devolvió hace pocos meses en plena pelea por la opa–, y dos, para reducir más un mercado que tiende al oligopolio.
El siguiente movimiento del Sabadell puede ser vender su filial británica, TSB, y prometer repartir más beneficios a los accionistas. Pero el banco de origen vasco replica porque quizá cree que les puede convencer, quién sabe si mejorando su oferta. Todos juegan sus cartas y en un tiempo veremos si alguien va de farol.
